Se me pidió hacer una interpretación de este estilo con una única premisa; que el encabado fuera a media espiga, es decir una especie de híbrido entre la espiga enteriza y la espiga oculta. El mango es una sola pieza de madera con una ranura donde encastra la espiga del cuchillo que viene a ser algo así como media espiga enteriza, por lo demás lleva remaches como si fueran cachas normales, de modo que la espiga es visible por arriba y queda oculta por debajo. Es algo común de ver en cuchillos industriales pero no en artesanales, además se supone que es muy útil cuando se trabaja en climas fríos.
Comencé con un pedacito de disco de arado que todavía me quedaba, acero 1070. lo estiré con forja, corté y desbasté la hoja.
Templé solo la hoja en parafina, acá todavía no hacía los agujeros para el mango.
Hice un trabajo de lima o "filework" en el lomo en la parte que sería visible en la parte superior , cuando encabé rellené el espacio entre la madera y el acero con resina epoxica negra, haciendo resaltar el metal y el diseño del limado. Haciendo click aquí hay un bien tutorial sobre el tema.
Por cierto la madera es mezquite, los remaches de hierro y el pasatiento es tubo de latón, las tres piezas están remachadas atravesando tanto la madera como el acero y más la resina que pega todo hacen un conjunto a toda prueba. Este tipo de enmangue es muy bonito y sólido además de que siempre resalta y llama la atención de quien examina el cuchillo, me parece considerablemente más complicado de hacer pero ya tengo en marcha otros cuchillos de mayor tamaño que seguirán este sistema.
Otra cosa recalcable es que se me ocurrió hacerle un inserto de cobre a la vaina, es una laminilla de cobre que obtuve cortando y aplanando un tubo cualquiera de instalaciones de agua o gas. Luego "repuje" a hundiendo a golpes algo así como.......¿una estrella?.........no sé, fue más un experimento pero me mostró las posibilidades para hacer cosas más complejas en el futuro.
La lámina de cobre está entre dos capas de cuero, una fina por dentro (no sale en la foto) que está en contacto con el cuchillo y otra de vaqueta que en el exterior solo sirve de marco al cobre, este está igualmente pegado, agujerado y cosido.
Solo uve que tener cuidado de que los agujeros en el cobre sean bastante grandes para que el hilo jamás entre en contacto con el borde de los mismos pues acabaría cortandose, además de que la lámina de cobre sea ligeramente más pequeña que las piezas de cuero, así al aplicar el pegamento y hacer presión sus cantos quedan totalmente ocultos.
Y ahora el conjunto terminado:
Y ya, ah, el filo es convexo, la hoja está patinada con vinagre y descubrí que una forma de dar un acabado muy bonito al cuero es diluir óleo color marrón oscuro en aceite le linaza y teñir-cebar el cuero con esto, para luego aplicar la cera para cuero que uso siempre.
En paralelo hice también otro cuchillo ideado para las mismas tareas, se fué con la misma persona y será compañero del anterior. Este es un poco más simple, lo llamé "Nessmukku" por combinar una hoja de Nessmuk con un mango de Puukko, este es de acero 9620, con espiga oculta, un separador de hueso y el cabo de madera de carya.
Y ya que estamos con esta temática meteré otros dos cuchillines que van destinados a las mismas actividades de cuereo, son interpretaciones del estilo Nessmuk:
Nos leemos pronto, voy a ver que puedo rapiñar en la cocina.